martes, 8 de diciembre de 2020

EL LLANTO DEL CAZADOR

 

Hace mas de 35000 años en el Paleolítico Superior, cuando el hombre habitaba Europa en tribus de cazadores recolectores y al abrigo de refugios naturales o al aire libre, comenzó a nacer la cultura humana, con una explosión artística y técnica sin parangón en otros tiempos.


La herramienta lítica, la tecnología, las muestras de arte parietal y mueble nos dan pistas de como era ese hombre, que con una poca esperanza de vida daba muestras de tener poco a poco el conocimiento sobre la fauna que le rodeaba y sus procesos biológicos a través de la observación directa, plasmándose posteriormente todo ello en lo que se llamaría arte rupestre con esplendorosas muestras en Lascaux (Francia), Altamira y El Castillo, en Cantabria (España) como ejemplos, santuarios rupestres del pasado paleolítico del hombre y de la naturaleza con la que convivía.

 

Los bisontes europeos de la cueva de Altamira en Cantabria aprovechan los resaltes de las paredes, dando así un gran realismo a la escena, se podría considerar la capilla sixtina del Paleolitico

 Pero hay un hecho que cambiaría la vida del hombre para siempre, ya en que algún momento del Paleolítico Superior, se domesticó al perro, a partir del lobo, que supuso una gran ayuda para la caza, una caza presentada por algunos especialistas como una actividad colectiva minuciosamente organizada, los primeros restos de enterramientos de perro domesticado conocidos datados de este periodo se han encontrado en Ain Malaha (Palestina) y en Palegrawa (Iraq).

 

Imagen de la película Alpha de 2018, del director Albert Hughes
que cuenta la historia del hombre paleolítico.

Comienza entonces en ese periodo una andadura desde el momento en la que los lobos se acercan a las hogueras humanas o a los campamentos para devorar los restos de comida o la caza abandonada por el hombre, lo que creo una relación simbiotica, incluso cuando el hombre abandono la vida nómada y se volvió sedentario, cuando consiguió domesticar el ganado, fue el guardián de sus rebaños, contribuyendo a la riqueza humana, lo que nos permitió vivir juntos hasta el presente.


Se ha utilizado al perro también para la guerra, el perro de guerra, en todas las culturas conocidas, los rusos entrenaron a sus perros en la segunda guerra mundial, mediante el condicionamiento de Pavlov, los perros con un explosivo adosado al cuerpo se colocaran bajo los tanques alemanes para hacerlos estallar, se ha utilizado también para experimentos científicos, también en Rusia, el caso de la perrita Laika, una perra callejera que fue el primer ser vivo terrestre en orbitar la tierra, un hito en la historia de la astronáutica.

 

Lo rusos entrenaron a sus perros para destruir los tanques alemanes mediante el condicionamiento de Pavlov.

 


La perrita Laika, el primer ser vivo terráqueo que orbito la tierra, fue parte del programa espacial soviético.

En la actualidad los perros K son entrenados para todo tipo de tareas, sobre todo la búsqueda de explosivos, la defensa perimetral de bases y cuarteles , la policía los entrena para la detección de drogas, billetes, armas, contrabando, etc., se utiliza por ciertas asociaciones de invidentes como guías de ciegos, o como detector de enfermedades, como el coronavirus.

 

Los perros K son parte de las operaciones de elite de todos los ejercitos
Las unidades cinologicas son utilizadas por todas las policías del mundo, aquí en una imagen de los GEO la unidad de elite de la policía nacional con una unidad canina.


Nada escapa al olfato y a la pericia de estos animales, que jugando, con sus super poderes caninos, han cambiado al hombre y al mundo, animales que dan la vida por nosotros en los campos de batalla o salvan vidas arriesgando la suya propia, una historia que se remonta a mas 35000 años cuando un cazador sollozaba al pie de la tumba de su perro, un perro que no era su mascota, sino su compañero de caza, uno mas de la tribu, uno mas de la manada, uno mas de la familia.



PD:

Este articulo esta dedicado a la memoria de Ambar una perra sacrificada el 7 de diciembre de 2020 con un cáncer terminal, la recordare siempre tumbada plácidamente a mis pies cuando iba a casa de mi hermano.



Bibliografía:


JORGE JUAN EIROA; Nociones de Prehistoria general; Editorial Prehistoria; Barcelona 2003


JESUS GONZALEZ y ALFONSO MOURE; HISTORIA DE LA HUMANIDAD; EL ORIGEN DEL HOMBRE; Arlanza ediciones; Madrid 2000; VOL I